De formal a casual en 4 pasos

Un día laborable cualquiera. Después del trabajo has quedado con un@s amig@s para ir a tomar algo, pero no te da tiempo de pasar por casa para cambiarte. ¿Qué haces? ¡En el post de hoy te muestro mis trucos para no tener que cambiar de ropa e ir lo menos cargada posible! Solamente cambiando alguna prenda y los zapatos conseguimos looks totalmente diferentes.

¡Así que… allá vamos con la transformación!

Primero de todo, hay un imprescindible en todo esto: un maxi bolso. Y su función no es otra que poder llevar todo lo necesario para el cambio sin tener que cargar con bolsas adicionales.

Los 4 sencillos pasos que sigo son los siguientes:

1.  Cambiar el calzado. Es lo que considero primordial para cambiar de un look formal (de oficina en mi caso) a un look casual. Para el look formal escogí unas bailarinas para que luego me pudieran caber bien en el bolso (unos tacones estilizan más y quizás dan otro efecto al vestido, pero no hay que subestimar unas cómodas bailarinas que ocupan bien poco! 🙂 )
2. Cambiar la parte de arriba. Para el look formal una chaqueta tipo chanel es perfecta para poder doblarla fácilmente y guardarla en el bolso. Otra buena opción sería un cárdigan. Si escogemos por ejemplo un blazer, será más difícil que quede bien doblado y nos aseguramos unas horribles (y temibles) arrugas. Para el look casual os propongo dos opciones: sudadera o cazadora tejana.
3. Desaliñarme el pelo con los mismos dedos.
4. Cambiar de labial. Psicológicamente me da la sensación de que definitivamente he cambiado de estilo. Así que para el look formal opto por un rojo, mientras que para el casual me decanto por un tono berenjena mate.

Os dejo las fotos del cambio y espero que me digáis qué os parece y qué trucos utilizáis vosotras??!!

Besooos!!

Look informal

Look casual 1

Look casual 2