¡Pssst, pssst!
Os voy a contar un secreto… ¿Os habéis fijado qué luminosidad desprende mi cara en los dos últimos posts publicados en el blog? ¿No? Pues os dejo aquí el de PUNTO y aquí el de LOVE CULOTTE para que volváis a verlos y os fijéis.
Os cuento… para hacer las sesiones de fotos de estas dos publicaciones utilicé el iluminador Strobe and Go de W7, un iluminador en stick que me gusta muchísimo cómo queda y el acabado que deja en los pómulos. Además, es un producto que, por si fuera poco, cumple con las tres B:
- Bueno: creo que no tiene nada que envidiar a iluminadores de marcas más reconocidas en el mundo del maquillaje, incluso supera a muchos.
- Bonito: ya he comentado que me encanta el efecto que deja en los pómulos. Es poco pigmentado, por lo que es ideal para utilizarlo a diario. Digamos que deja una luz sutil en la piel muy bonita.
- Barato: ¡¡¡2,99€!!! No hace falta decir nada más.
¿Qué más se puede pedir?
El formato en barra me parece muy cómodo para su aplicación y para poder transportarlo fácilmente, ya que no se necesitará nada más que el producto para poder aplicarlo. Con la yema del dedo lo difuminamos bien y listos.
Tened en cuenta que es un producto en crema, así que hay que utilizarlo antes de aplicar los productos de maquillaje en polvo.
Existen dos tonos: rosa (Pink Lights) y dorado (Moonlight). El mío es el dorado puesto que mi subtono de piel es amarillo.
Lo podréis encontrar, por ejemplo, en las tiendas físicas y tienda online de PRIMOR y en Maquillalia.
¿Ya lo tenéis? ¿Qué os parece? ¡Si os animáis a probarlo me lo dejáis en los comentarios!